martes, 15 de febrero de 2011

UNA FUNDACIÓN EN ESPERA

Ha pasado ya un año y pico (vamos para dos) de la muerte de Diego Jesús Jiménez y la fundación que en Priego llevará su nombre sigue esperando, aunque las noticias son como el habitual juego de las olas en el mar: tan pronto vienen optimistas como se retiran acongojadas, pero en tiempos de crisis y abulia cultural es cuando menos hay que perder las esperanzas porque si no, la derrota es total. No estamos muy sobrados de instituciones de esa naturaleza y menos aún de una que, como esta, hará de la literatura en general y la creación poética en particular su elemento básico, de manera que, aunque sea de forma simbólica, desde aquí le lanzo unas palabras de apoyo y estímulo a su principal impulsor, Juan José Gómez Brihuega, para que su entusiasmo no decaida entre las desdichas de la burocracia. La memoria de Diego Jesús, el carácter literario de Priego y el amor por la poesía bien merecen el esfuerzo continuado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario