En algún sector consideran que esto es un paso
atrás, una vuelta al pasado. Otros pensamos que es un paso adelante, una
recuperación, un avance, ocupar un hueco espacioso que ahora está vacío. Se nos
ha ocurrido, en el seno del Cine Club Chaplin, que sería bueno volver a
celebrar en Cuenca una Semana de Cine, parecida a la que existió durante 18
años y que alguien, algunos, en uno de esos momentos de furia destructora que
invade a los jerifaltes conquenses cuando dicen que hay crisis, decidieron
suprimir, por ahorrar. Porque siempre se ahorra en cultura, nunca en otras
cosas que conocemos bien y no quiero mencionar aquí porque no hace falta
decirlo con todas las letras.
La Semana de Cine ocupaba esos días, una vez al
año, con estrenos absolutos de películas españolas que venían arropadas por
directores, actores, guionistas, productores y críticos, que se encargaba de
hacer una introducción y participar en un coloquio. No estoy seguro de que
ahora se pueda reproducir el mismo esquema, ni falta que hace. Los tiempos
cambian, las modas también y, desde luego, las personas lo hacen. Lo que sí es
cierto es que en Cuenca, esa ciudad maravillosamente cultural de la que todos
los políticos hablan y pocos conocen, no hay ninguna cita especial en torno al
cine, repartido, durante el año, en la adocenada programación que ofrecen las
salas comerciales entre las que se abre hueco, los miércoles, las piezas
sabrosas que ofrece el Cine Club. Probablemente la ciudad no está preparada ni
tiene fuerzas suficientes para promover un auténtico festival y a lo mejor
tampoco es ese el camino. Pero una Semana de cine español sí se puede hacer y,
de conseguirlo, no será un paso atrás ni un monumento a la nostalgia, sino una
apuesta de futuro o, al menos, una propuesta de presente. En eso estamos, por
ahora con perspectivas de avanzar, sin considerar los obstáculos que surgirán,
pero de eso hablaremos otro días. Por ahora podemos contemplar esa fotografía,
de una de las Semanas antiguas. Ahí están unos jovencísimos José Sacristán,
Fiorella Faltoyano y José Luis Garci, con Alberto Martínez Casillas, el
presentador de esta comparencia. Imaginemos quienes podrían ser ahora los
protagonistas de la cita, si es que la idea fructifica.