lunes, 11 de abril de 2016

EL CUERPO HUMANO, SEGÚN MARCO PÉREZ


                       
             
               Todo el mundo, o sea, cualquiera, medianamente informado, sabe y dice que Luis Marco Pérez fue uno de los grandes imagineros modernos, artífice fundamental en la plasmación plástica de la Semana Santa de Cuenca. Además, también se reconoce su mano en la realización de notables escultoras civiles, de las que hay una buena muestra en la ciudad de Cuenca. A todo eso, sabido y repetido, se une otra dimensión, menos conocida pero igualmente muy valiosa. Y que, dicho sea de paso, debería ser mejor conocida. Ahora hay una buena oportunidad de comprobarlo, porque hasta primeros del mes de mayo se puede contemplar, en la Sala de Exposición del Museo de Cuenca, en la calle Princesa Zaida, una exposición titulada Marco Pérez: el descubrimiento de la inspiración y que en realidad es todo un prodigio en el estudio y la plasmación de la naturaleza del cuerpo humano.
            Con 50 dibujos y seis esculturas que forman parte de los fondos del propio Museo, cuya importante colección de obra moderna permanece desgraciadamente oculta, almacenada, en espera de ese viejo proyecto, que nunca acaba de cuajar, en forma de ampliación y que permitiría exponer debidamente y de forma permanente esos fondos. Pero dejando lamentos aparte, que no es el caso ahora, diré que la muestra es un acontecimiento verdaderamente ilustrativo sobre la auténtica dimensión artística de Luis Marco Pérez (Fuentelespino de Moya, 1896/Madrid, 1983), un verdadero artista de imaginación despierta y mano firme. Atrae, de manera especial, su enorme capacidad para estudiar los matices del cuerpo humano, singularmente el femenino, al que el artista se acerca con fruición, buscando los pliegues y el músculo, el detalle y el alma, el latido oculto pero sensible y la belleza, sobre todo la belleza, que se desprende de cualquier criatura viva.
            La habitual soledad en que se encuentra la sala de exposiciones ayuda al paseo metódico, sin prisas, seguido paso a paso con delectación, a través de las imágenes ciertamente atrayentes que nos brinda el maestro.


No hay comentarios:

Publicar un comentario